Aunque ya el magistrado de la Corte Constitucional, Jorge Pretel, quien está investigado por corrupción, envió su solicitud para que el Senado le apruebe una licencia de dos meses, con el argumento de defenderse en el proceso que se le sigue, todo parece indicar que sus días están contados en ese Alto Tribunal.
El caso no va a quedar por ahora con el retiro de la Presidencia de la Corte. Las presiones de la opinión pública, que cada día se suman a esa petición, y las voces en el Congreso de algunos senadores, que han manifestado que en vez de aprobarle la licencia se le debe pedir su renuncia, precipitan la salida de Pretelt.
Así lo sostiene el senador del Partido de la U, Mauricio Lizcano, quien liderará este martes ante la plenaria de la corporación dicha idea, tras argumentar que las circunstancias y pruebas conocidas y que lo involucran en actos corruptos como Presidente de la Corte, no dan para aprobarle una licencia, sino para pedirle su retiro definitivo de ese magno tribunal.
Pero la situación se le empeoró aún más en las últimas horas. El comunicado de la Comisión Interinstitucional de la Rama Judicial integrada por los presidentes del altas corte y el fiscal General, Eduardo Montealegre, quienes le pidieron la renuncia, argumentado que “los señalamientos hechos en su contra, comprometen a toda la justicia en pleno”, empujan más su salida.
"Cuando las actuaciones de un magistrado se cuestionan seriamente, al punto de poner en tela de juicio su transparencia y probidad, la Rama Judicial entera se ve impactada negativamente, entre otras razones, porque afecta su legitimidad y se pone en entredicho la capacidad del aparato de justicia para resolver de manera imparcial los conflictos de intereses entre ciudadanos", sostuvo el Presidente de la Corte Suprema de Justicia, Leonidas Bustos, quien leyó el comunicado.
Según lo consignado por la Comisión, dicha solicitud no viola ni interfiere la presunción de inocencia del magistrado Pretelt:"es pertinente señalar que los miembros de esta Comisión consideran fundamental garantizar en todo momento la presunción de inocencia, el derecho a la defensa y las demás garantías que componen el derechos fundamental al debido proceso de todo ciudadano", apunta la Comisión.
La presión en todos los órdenes tiene a Pretelt de un hilo para que abandone definitivamente la majestad que le confirió, por elección, el Senado en pleno, para ser magistrado de la Corte Constitucional.
Será este martes en la plenaria de la cámara alta, cuando se reanudan las sesiones ordinarias del Congreso, se ponga a consideración el tema que el mismo Pretelt, a través de una carta a la Mesa Directiva de la Corporación, se someta a consideración para que le den licencia de dos meses como magistrado de la Corte Constitucional.