Barrios de Kennedy y Bosa en Bogotu00e1, con el agua hasta el cuello...

Por Redacción Bogotá - Cuando Miguel Angel Robles, un hombre de 62 años, salía de su casa inundada con su esposa sobre sus hombros, alcanzó a mirar al presidente Juan Manuel Santos, quién vestido con un chaleco rojo, anunciaba las medidas del Gobierno para la atención de los damnificados del invierno. 

Su perspectiva de vida cambio en la noche del miércoles –el día de las velitas– cuando el agua comenzó a entrar a su casa, luego del desbordamiento del río Bogotá que circunda las localidades de Bosa y Kennedy, cuyo resultado no puede ser peor: 10.000 familias afectadas. Ecospoliticos.com fue testigo de esta imagen, que hizo brotar del señor Robles lágrimas. “No sabemos que vamos hacer. No tenemos donde ir. Si el Gobierno no nos apoya, Esta noche dormiremos en la calle”, en medio de un intenso sol que despertó el mal olor de las aguas estancadas en medio de la visita presidencial.

Como esta escena, son muchas las que se registran en las dos localidades de la capital colombiana –ubicadas al sur- y con una alta población, quienes se han visto obligados a dejar sus casas, estar ausentes de su trabajo e incluso pensar si se desplazan a otro lugar del país, donde familiares amigos.

Santos, en su rápida visita acompañado por la Alcaldesa (e) Clara López dijo que el Gobierno dio luz verde de un apoyo económico a los damnificados, quienes al cierre de esta edición, eran protagonistas de largas colas en el proceso de censo y recibían vacunas para evitar posibles epidemias, al igual que un kit básico para atender la emergencia.Sin embargo, a pesar del esfuerzo de las autoridades encabezada por la Defensa Civil, La Cruz Roja, El Cuerpo Oficial de Bomberos de Bogotá, la Policía y el Ejército, los amigos del ajeno hacían de la suyas en las casas deshabitadas e incluso algunos de ellos, fueron judicializados al entrar la tarde.

Desde el Carro Comando del Cuerpo Oficial de Bomberos –en una sala de crisis- se tomaban las medidas de atención de la emergencia que puede prologarse por varios días y que tiene a las autoridades en alerta de primer grado, al tiempo que la Administración Distrital busca el apoyo de la cooperación internacional para salir al paso a uno de los fenómenos naturales más fuertes de los últimos años en la capital.

A esta nota le acompañan imágenes de la emergencia que sacude a la capital colombiana y que le da la vuelta al mundo.

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