Las Farc negaron que son narcotraficantes y al contrario, se declararon rebeldes políticos.
En un comunicado de ese grupo insurgente, leído por Calor Antonio Losada, vocero de los negociadores en La Habana, expresó que nunca admitirán que que sean señalados como narcotraficantes: "Nunca hemos admitido ni admitiremos ser narcotraficantes".
Según las Farc, el delito de rebelión es un delito político y el presidente Santos está confundiendo a la opinión pública al asociar el delito político con el narcotráfico. Al hacerlo de esa manera está, según ellos, "incurriendo en una distorsión conceptual de fondo, que en vez de concitar apoyo a la causa de la paz, genera confusión".
Agregaron que "El delito político es otro asunto. La rebelión es delito político, y todo acto, toda conducta que se realice para hacerla efectiva, tiene carácter conexo". enfatizó la guerrilla de las Farc.
Afirman que no se involucran en cultivos de marihuana, coca o amapola, ni en actividades de producción o comercialización de drogas ilícitas, y por lo tanto: “las acusaciones que nos ligan al narcotráfico son pérfidas e inútiles en el proceso de la reconciliación”.
