Los 77 obispos del país, reunidos en la Ciento Treceava Conferencia Episcopal, hicieron un llamado a todos los colombianos para viabilizar la apertura de un diálogo que conlleve a la unidad nacional.

¡Basta ya de toda guerra! "Caminemos juntos para erradicar cualquier expresión de odio y violencia..."

Los 77 obispos del país, reunidos en la CXIII Conferencia Episcopal, hicieron un llamado a todos los colombianos para viabilizar la apertura de un diálogo que conlleve a la unidad nacional.

En medio de las deliberaciones los prelados fueron contundentes en señalar que el llamado a la Unidad Nacional “No florecerá sin un serio y permanente compromiso por la paz y el respeto por la vida. ¡Basta ya de toda guerra! Caminemos juntos para erradicar cualquier expresión de odio y violencia, que no solo nos empobrecen materialmente, sino que también nos deshumanizan y aniquilan espiritualmente. Necesitamos una nueva apertura al diálogo que debe ser productivo, como instrumento de construcción y de consolidación en pro de una democracia incluyente y participativa”.

Animan a los colombianos para que a pesar del dolor de muchas heridas que aún no han cicatrizado, se esfuercen por trabajar en alcanzar la anhelada paz, “de modo que los pasos que demos hacia la reconciliación se cimienten en la verdad, que es el alma de la justicia y nos conduce a la libertad”.

Camino Sinodal

Los jerarcas de la iglesia católica colombiana destacaron que la misión como pastores es la de dedicar, conjuntamente con los colombianos, el Camino Sinodal propuesto por el Papa Francisco, es decir, “una Iglesia de escucha; donde todos, pastores y fieles, podamos escucharnos y aprender unos de otros”, para fortalecer el diálogo y lograr la unidad nacional.

Los obispos agradecieron a todas las comunidades y personas de bien que han hecho sus aportes al Camino Sinodal: “Sus voces nos animan a no cejar en nuestra labor profética y también nos confrontan para ser una Iglesia misionera y solidaria, que anuncie el Evangelio de salvación de Cristo Jesús, edificándonos en el amor y la auténtica fraternidad.

Destacaron el continuo dolor de los pueblos, fruto de la violencia y la proliferación de los grupos al margen de la ley, la ilegalidad, el narcotráfico y la inequidad social, en ese sentido, los prelados “anhelan soluciones a dichos problemas y claman por reformas sustanciales que le cierren el camino a toda forma de corrupción”.

Expresaron su preocupación por el tema de la educación de niños, jóvenes y adolescentes, quienes “cada vez se ven más desencantados por la falta de oportunidades”. Frente a esta realidad señalan la urgencia para dinamizar y promover la participación de los jóvenes, escuchándolos y alentándolos a que sueñen con un futuro mejor.

Cuidado del planeta

Fue otro de los temas que se expuso en la CXIII Asamblea de la Conferencia Episcopal. Los obispos fueron enfáticos en señalar que el daño que se está haciendo a la Amazonía por cuenta de proyectos que “laceran nuestra Casa Común” es irreversible y dañino para un futuro.

Involucrar a desprotegidos

Frente a la polarización que ha venido envolviendo la dinámica del país en los últimos tiempos, los prelados aseguran que es urgente “recrear la voluntad de ser nación y de construir la unidad en medio de la diversidad”, involucrando a los diferentes sectores de la sociedad, de manera especial a los más desprotegidos.

Bogotá, D. C, 10 de julio de 2022

Redacción Ecos Actualidad

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