En Caracas, Venezuela, el Gobierno inició conversaciones para alcanzar la paz con disidencias de las Farc Segunda Marquetalia, organización al margen de la ley que se apartó del Acuerdo de Paz del 2016 y que se firmó entre el Estado colombiano, en el gobierno de Juan Manuel Santos, y la extinta guerrilla de las Fuerzas Armadas Revolucionarias FARC - EP.
Los protagonistas de dichas conversaciones son siete delegados del gobierno Petro y el mismo número de esa organización insurgente al mando de Iván Márquez, quienes participarán en los diálogos hasta este sábado en su primera etapa.
En el acto inaugural del inicio de conversaciones se dio a conocer un comunicado conjunto entre las partes: "Pretendemos desarrollar los temas específicos de la agenda de diálogos de paz, definir los protocolos de la negociación y anunciar las primeras decisiones sobre medidas y acciones para contribuir a avanzar en el desescalamiento del conflicto y en los avistamientos territoriales para la paz".
El inicio de las conversaciones se da después de la firma, también en Caracas el 5 de junio, de un documento fundacional enfocado en "promover cambios y reformas democráticas para la paz en la que las poblaciones y los territorios sean la prioridad, fortaleciendo la movilización social", señalaron delegados del gobierno del presidente Petro.
Se destaca fundamentalmente establecer comisiones negociadoras para alcanzar des escalamiento del conflicto, construir territorios de paz y atención a las víctimas del conflicto.
Francisco Javier Daza, investigador de la Fundación Paz y Reconciliación (PARES) dijo que "No se identifica que alias Iván Márquez o la Segunda Marquetalia estén buscando una pista hacia lo político" y agregó que se trata de “buscar desescalamiento de la violencia en los territorios donde ellos operan: la idea de llegar al poder, del poder estatal, no figura en la agenda de lo que se va a negociar".
El comandante de las Fuerzas Militares de Colombia, general Helder Giraldo, anunció que hay “acercamientos" para llegar a un cese al fuego bilateral.
Entre tanto el Gobierno ha acogido con satisfacción la renuncia de la guerrilla a los secuestros como forma de financiación, su predisposición a negociar con ganaderos y grandes latifundistas a fin de lograr un reparto equitativo de las tierras --demanda original de las FARC--, así como su retórica a favor del medioambiente.
Importante señalar que está pendiente establecer el sustento jurídico para el avance de las negociaciones, teniendo en cuenta que dicha organización al margen de la ley, perdió el estatus político al haberse desligado después e haber firmado el Acuerdo de Paz en el 2016.
Bogotá, D. C, 24 de junio de 2024
Redacción Ecos Actualidad