Barranquilla, 20 de mayo de 2018. Por Giovanni Décola.- En pleno centro de esta ciudad, el candidato de la Colombia Humana, Gustavo Petro, hizo su cierre de campaña, ante más de 50.000 seguidores, quienes ante la consigna de: “se vive, se siente, Petro Presidente”, están convencidos, de que solo un fraude, impedirá que un costeño, vuelva a ocupar el solio de Bolívar, como lo hiciera ya hace más de cien años, Rafael Nuñez.
Y precisamente, Gustavo Petro, inició su discurso, advirtiendo a sus simpatizantes, “que un fraude cocinan el señor Presidente Juan Manuel Santos, el Registrador Nacional Juan Carlos Galindo y la Presidenta del Consejo Nacional Electoral, Yolima Carrillo, a quienes denunció de estar amangualados para fraguar un fraude que beneficie a Germán Vargas Lleras”.
Para pretender conjurar dicho fraude, invitó a toda su militancia, a ocupar a partir de las cuatro de la tarde del domingo 27 de mayo, las principales plazas públicas de todos los municipios del país, y permanecer allí, hasta tanto su campaña nacional expida un comunicado donde manifestarían si hubo o no fraude electoral.
Hizo denuncias concretas sobre la falta de transparencia de las autoridades electorales, quienes se negaron a permitir la auditoría a los software de transmisión de datos electorales y de jurados de votación, y también denunció que no permitieron que organismos internacionales hicieran revisión a los softwares mencionados.
En tono amenazante, manifestó que junto a la ciudadanía no permitirá que le roben las elecciones.
Invitó a Sergio Fajardo y a Humberto De La Calle, a conformar una gran coalición democrática, indistintamente de quien pase a segunda vuelta, y sean cuales sean las diferencias en los guarismos electorales.
A Gustavo Petro se le vio acompañado de los senadores electos Gustavo Bolívar y Aida Abella, de su compañero de consulta, Carlos Caicedo, del actor Gregorio Pernía, de los excandidatos al Senado Máximo Noriega y Cristóbal Padilla, el exrector de la Uniatlántico Ubaldo Enrique Meza, del exsenador José Matías Ortiz, Hollman Morris, su esposa Verónica Alcocer y su hijo Nicolás, numerosos exconcejales y diputados, exmilitantes del M-19, muchos progresistas, dirigentes de MAIS y numerosos militantes de base del Partido Liberal, cuya presencia fue tan notoria, que luego de terminado el discurso de Gustavo Petro, éste le permitió a hablar a Antonio Bayona, coordinador de los Liberales con Petro en la ciudad de Barranquilla, quien resaltó que el ideario Liberal de Rafael Uribe, López Pumarejo, Gaitán y Galán, hoy lo encarna Gustavo Petro, a quien calificó como el único candidato capaz de hacer las reformas sociales que reclama el pueblo irredento.
Gustavo Petro se fue vitoreado y aclamado por sus bases y en la cancha de fútbol de Cevillar, donde se hizo la gran manifestación, Petro jugó de local.
La mesa está servida, y si nos atenemos al grosor demostrado en las manifestaciones, definitivamente, el candidato de la Colombia Humana, no tiene contendor. Se pudo constatar que sus seguidores llegan por su propia cuenta, no reparten refrigerios, ron o comida, y mucho menos plata. Pero las plazas no votan, y este 27 de mayo se verá, si sus seguidores se multiplican en las urnas o si el lleno de las plazas era un simple espejismo, que la izquierda seguirá pregonando, como su gran fortaleza.
