Después de seis meses de haber restablecido relaciones diplomáticas, los Gobiernos de Estados Unidos y Cuba, decidieron abrir las respectivas sedes, lo que se define como un gran paso a seguir integrándose dentro del contexto mundial, luego del bloqueo económico que recibió la isla caribeña.
La expectativa mundial de la apertura de las sedes diplomáticas, se dará este miércoles, como resultado del histórico avance gracias a que el presidente Barack Obama decidió sacar a Cuba de la lista de países que patrocinan el terrorismo, en la cual se encontraba Cuba desde 1982.
Ambas delegaciones, reunidas en mayo en Washington, habían advertido que una vez se lograra modificar la lista de países que patrocinan el terrorismo, donde se excluyó a Cuba, el siguiente paso sería la reapertura de embajadas, tema del cual está pendiente el mundo.
Por ahora no se ha hablado de quienes serían los embajadores en los respectivos países, pero lo que si es cierto es que la apertura de embajadas cerrará la fase del restablecimiento de las relaciones diplomáticas, pero no la total normalización de sus relaciones.
Según el Gobierno de Cuba, es necesario el levantamiento del embargo económico impuesto a la isla en 1962 y la devolución de los terrenos que ocupa la Base Naval de Guantánamo, temas difíciles de resolver, según analistas internacionales.