Bogotá, D. C, 22 de abril de 2018.- Por Luis Fernando García Forero. Foto Ecos.- El Presidente del Parlamento Andino Fernando Meza Moncada, es un diputado chileno que asumió esa dignidad en la corporación desde julio del 2017. Considera que además de propugnar por la integración de los países de América Latina, señala que dicho parlamento es un foro de amistad entre los pueblos.

Nació y surgió de una familia humilde. Sus primeros estudios los realizó en el Liceo de Hombres de Temuco, una ciudad y comuna del sur de Chile, capital de la provincia de Cautín, en la región de La Araucanía. La enseñanza superior la realizó en Cuba, donde gracias a una beca otorgada por el gobierno de Salvador Allende pudo ingresar a la Universidad de La Habana para estudiar medicina. Se doctoró en Reumatología en la Universidad de Bilbao en España. Trabajó como director médico de la lucha Anti-Drogas y Contra el Sida de la Comunidad de Madrid en España. De regreso a Chile, se dedicó a ejercer su profesión en las zonas rurales.

Desde 1964 ingresó a la política como militante del Partido Radical Social Demócrata.  El Golpe de Estado de 1973 contra Allende  lo sorprendió en Cuba y allí se exilió hasta que viajo a España. Regresó a Chile en 1997, fue electo presidente regional del Partido Radical Socialdemócrata (PRSD) en la IX Región y en las elecciones parlamentarias fue electo y reelecto varias veces como diputado.

En el Parlamento Andino, cuya sede de sus sesiones está en Bogotá, Fernando Meza Moncada habló con ECOS sobre su gestión como Presidente de esa corporación, también se refirió a la situación de los países del hemisferio y de la paz de Colombia.  

ECOS: ¿Qué opinión le merece lo que está ocurriendo en la frontera entre Ecuador y Colombia?

FMM: Estamos en presencia de un problema que no afecta exclusivamente a los dos países, es un tema que perturba a la región completa. El narcotráfico, el terrorismo, la delincuencia, no podemos circunscribirla a un problema local. Como Parlamento Andino tenemos la responsabilidad de trabajar no solo por la integración de nuestros pueblos, de nuestra América morena, sino defenderla en su conjunto.

ECOS: ¿Qué alcance tiene la resolución que aprobaron sobre el tema en la plenaria de la corporación?

FMM: La defensa de la unidad de nuestros pueblos  y la seguridad de las naciones. Unir los gobiernos por encima de las diferencias, combatir el narcoterrorismo, la delincuencia en general. Le pedimos como corporación al Gobierno de Ecuador y Colombia luchar contra la delincuencia organizada. También el apoyo de otros gobiernos, desde Argentina, Bolivia, Perú, Ecuador, Colombia, Chile, para que  sea una realidad la fortaleza de la democracia y así erradicar definitivamente esta lacra que nos hace tanto daño.

ECOS: ¿Una disidencia de las Farc tiene en jaque la seguridad y la convivencia en la frontera de los dos países?

FMM: Es insólito. Creo que ha faltado voluntad política para unirse y mancomunadamente luchar contra ese flagelo que nos azota. Sino lo detenemos ahora con valentía, nos vamos a ver afectados todos los países de la región. Debemos asumir la responsabilidad para erradicar ese fenómeno de la violencia por el presente y futuro de nuestras generaciones. Por eso insistimos en la unidad en la lucha contra estos delincuentes por parte de todos los gobiernos que integramos esta América Morena.

ECOS: ¿Cuáles son las prioridades en la agenda del Parlamento Andino?

FMM: Estamos aprobando un marco normativo que hemos trabajado con mucha intensidad. Le hablo de dos o tres, que son los últimos que hemos aprobado: violencia contra la mujer, desarrollo de las medianas empresas en la región andina, así como la homologación de los títulos en toda nuestra América.

ECOS: ¿Particularmente a qué se refiere el marco normativo para erradicar toda forma de violencia hacia la mujer?

FMM: Tiene que ver con las políticas para erradicar toda forma de violencia contra la mujer. Fíjese que insólitamente  nuestros países Chile y Colombia somos los que tenemos más alto índice de violencia contra la mujer. Hemos elaborado un marco normativo que hemos llevado a los parlamentos de los seis países que integramos hoy en día el Parlamento Andino para que se transformen en leyes de la República.

ECOS: ¿Chilenos y colombianos no dejamos el machismo? (Risas)

FMM: Así es. No lo hemos erradicado y debemos hacerlo a través de la educación de nuestros hijos y nietos. La mujer nos ha aventajado en muchas disciplinas, sobre todo en el intelecto. Se dice que una mujer puede hacer tantas cosas al mismo tiempo y el hombre solo una, eso es una realidad. Es un marco normativo que permite disminuir la violencia intrafamiliar.

ECOS: ¿El marco normativo que recomiendan para la pequeña y mediana empresa en la región andina, en qué consiste?

FMM: Tiene que ver con el impulso que los gobiernos le deben dar a los pequeños empresarios. Las pequeñas y medianas empresas necesitan un apoyo fuerte del Estado. En Chile se ha  avanzado mucho en ese aspecto por eso hemos traído ese ejemplo con el objeto que sea replicado por los demás países.

ECOS: ¿De alguna manera implica disminuir el desempleo con el apoyo del Estado?

FMM: El empleo en nuestra América y en el resto de mundo entero, depende fundamentalmente de las pequeñas y medianas empresas. En un mundo que prácticamente se está robotizando, las pequeñas y medianas empresas son las que entregan la mayor  cantidad de empleo. Por eso necesitan una atención especial por parte de nuestros gobiernos.

ECOS: ¿El marco normativo para el tema de la homologación de títulos, qué pretende?

FMM: Por ejemplo un médico Colombiano, un arquitecto, un abogado, un técnico de cualquier especialidad de Colombia, no puede ejercer su especialidad en Chile, Argentina, en Perú, Ecuador o en Bolivia. Entonces en este marco normativo que regula la homologación de los títulos profesionales y técnicos, va a estar supeditado por una comisión de acreditación que va a decir si este título vale. Va a permitir que las fronteras en este sentido vayan desapareciendo en nuestra región andina y podamos trasladarnos libremente al lugar que deseemos a ejercer nuestra profesión.

ECOS: ¿Qué está haciendo el Parlamento Andino con el tema de la corrupción que está afectando al todo el continente?

FMM: Es un flagelo tremendo, una forma de manifestación de la delincuencia de cuello y corbata, desgraciadamente de los altos ejecutivos del Estado. En los gobiernos nacionales, regionales y locales, ministros, fuerzas armadas, en distintos estamentos, aparece la tentación del poderoso caballero don dinero y se termina perdiendo por parte de la ciudadanía la confianza en lo político, la confianza en sus dirigentes  y eso va destruyendo y degradando las bases de la institucionalidad de cada uno de nuestros países. Tolerancia cero a la corrupción.

ECOS: ¿Cómo, en qué forma?

FMM: Valentía de los legisladores. Debemos denunciar o crear comisiones investigadoras en nuestros parlamentos cada vez que haya un hecho de corrupción. Pertenecí a la comisión investigadora que indagó las finanzas de la policía en Chile y descubrimos que muchos generales, exdirectores nacionales a la alta oficialidad había establecido un desfalco tremendo del orden de los 30 mil millones de pesos, es decir, se habían farriado fácilmente 100 millones de dólares entre ellos, se los habían repartido y esto con valentía los legisladores Chilenos metimos a la cárcel simplemente a los altos generales. Eso es cero tolerancia con los corruptos, hay que tenerlos en la cárcel. La corrupción está debilitando la institucionalidad de nuestros países y hay que atacarla con la mayor energía.

ECOS: ¿Es un tema que se debe prevenir a través de la educación, la cultura?

FMM: Tiene usted toda la razón. La base del comportamiento de la sociedad está en la educación que recibimos en los hogares y en las escuelas. Si no tenemos unos padres que enseñen bien desde la temprana edad a sus hijos ciertos modales, culturas de actuación social, niveles de honradez, niveles en torno al trabajo,  al respeto a los adultos mayores, a la convivencia social, no acabamos con la corrupción. La educación debe partir del hogar y continuar en la escuela, ahí tenemos la necesidad de tener maestros y maestras que estén aptos para educar como corresponda a las generaciones.

ECOS: ¿Coincide con lo que se aprobó en la VIII Cumbre en Lima y donde Colombia lideró impulsar la educación de calidad para disminuir la corrupción?

FMM: Efectivamente esta declaración de Lima que suscribieron todos los jefes de Estado presentes allí, también la hemos hecho en el Parlamento Andino. Muchos puntos, sobre todo el de la educación como mecanismo de liberarnos de la corrupción en el campo de los estamentos políticos y administrativos, han sido aprobados por el Parlamento Andino.

ECOS: Habló en la plenaria de esta corporación andina el Presidente de la CAF, sobre un pacto por la productividad para sacar adelante el desarrollo de los pueblos de América Latina, ¿qué piensa sobre el tema?

FMM: El Presidente de la CAF que es el Banco de Desarrollo de América Latina y que mueve más de 43.000 millones de dólares y que está destinado precisamente a fomentar el desarrollo de nuestros pueblos, tiene razón. La poca productividad que tenemos en América Latina comparada por ejemplo con países como Estados Unidos, es la razón por la cual no logramos alcanzar niveles de desarrollo.

ECOS: ¿Verdaderamente que está afectando la baja productividad en estos países?

FMM: Las políticas demasiado proteccionistas, demasiado subsidiarias por parte del Estado. Entregando muchos subsidios a mucha gente que les ha hecho perder el interés de trabajar, incluso a generaciones de jóvenes que prefieren recibir los subsidios y no trabajan. La baja productividad  cae en los campos y en las ciudades. Hay mucho éxodo de los campos a las ciudades aumentando el número de cesantes ilustrados y realizando muchas veces tareas que no están acordes a su preparación técnica o universitaria.

ECOS: ¿Cómo estimular la productividad?

FMM: Necesitamos el brazo y la mano de bancos como el que está hoy en el Parlamento Andino, la CAF y cuyo Presidente ha comprometido sus esfuerzos para apoyar todos los proyectos de infraestructura y que lleven sobre todo la posibilidad de aumentar la productividad.

ECOS: ¿Y disminuir la inequidad?

FMM: Sí. Este es otro de los dramas tremendos que estamos viviendo. Cada vez que hemos disminuido la pobreza en Chile, Colombia, Ecuador, Perú, en Bolivia, paradójicamente ha aumentado la desigualdad y esto es terrible. No puede ser que un puñado de personas de nuestra América reciban 20-30-40-50 veces más dinero del que reciben el 90 y tanto por ciento de los ciudadanos. Uno de los retos más grandes que tenemos es por lo menos disminuir y transformar a nuestra región en una región más igual y para eso hace falta generosidad y políticas que estimulen a que los de abajo suban, no tanto a que los de arriba bajen, sino que seamos capaces de levantar más a los más desposeídos.

ECOS: ¿Cómo ve la paz de Colombia?

FMM: La paz de Colombia es una asignatura pendiente todavía. La paz de Colombia es la paz de la región. Lo que está sucediendo con los alzados en armas que no se han desmovilizado, están impidiendo el sueño y el abrazo de la paz de nuestro hemisferio. Tenemos que entender que toda América se tiene que involucrar en esta lucha para que Colombia alcance la paz y alcance a derrotar a estas bandas que han hecho el drama de meter la droga en los hogares más sencillos y humildes de nuestra América, cesar en su empeño a través de la educación por un lado, de la prevención por otra y también de la lucha que tiene que ejercer nuestra Policía, nuestra inteligencia, que no ha sido muy fructífera hasta el momento.

ECOS: ¿Hace un llamado a aumentar la inteligencia militar?

FMM: Nuestro llamado es a unir a las inteligencias de todos nuestros países, que actúen de verdad con inteligencia, tenemos la estructura necesaria desde el punto de vista técnico - militar para poder cercar a estos delincuentes y terminar con ellos.

ECOS: ¿El 27 de mayo los Colombianos definimos el futuro de nuestro país, qué aspecto ve usted entre los candidatos que podría llevarnos a un mejor futuro?

FMM: No puedo inmiscuirme en los asuntos internos de Colombia desde el punto de vista político, pero naturalmente lo único que puedo desear es que el pueblo colombiano actúe con la madurez suficiente, como lo ha hecho en el pasado, para elegir a la mejor persona, que tenga las mejores cualidades desde el punto de vista humano, profesional, cuando hablo de profesional no me refiero a que tenga que tener altos estudios ni mucho menos, sino que sea realmente un profesional de la buena política para trasladar al pueblo de Colombia a alcanzar ese desarrollo que todos deseamos.

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